Documento para trabajar en clase
"Está
claro que todo el poder debe pasar a los Soviets. Debe ser también indiscutible
para todo bolchevique que un Poder proletario revolucionario (o bolchevique,
pues hoy es lo mismo), tendría aseguradas las mayores simpatías y el apoyo
abnegado de los trabajadores y explotados del mundo entero en general, de los
países beligerantes en particular y, sobre todo, entre los campesinos rusos. No
merece la pena detenerse en estas verdades, harto conocidas por todos y
demostradas hace ya mucho.
En
lo que sí hay que detenerse es en algo que seguramente no está claro por
completo para todos los camaradas, a saber: que el paso del poder a los Soviets
significa hoy, en la práctica, la insurrección armada. Podría creerse que esto
es evidente pero no todos se han parado ni se paran a meditarlo. Renunciar hoy
a la insurrección armada significaría abjurar de la consigna principal del
bolchevismo (¡Todo el poder a los Soviets!) y de todo el internacionalismo
proletario revolucionario en general.
Pero
la insurrección armada es un tipo especial de lucha política, sometido a leyes
especiales, que deben ser analizadas con atención. Carlos Marx expresó esta
verdad con mucho relieve al escribir que "la insurrección" (armada)
"es un arte, lo mismo que la guerra”. (…)
Aplicado
a Rusia y al mes de octubre de 1917, esto quiere decir: ofensiva simultánea, y
lo más súbita y rápida posible, sobre Petrogrado (…) Seleccionar a los
elementos más decididos (nuestras "tropas de choque" y la juventud
obrera, así como a los mejores marinos) y formar con ellos pequeños
destacamentos destinados a ocupar los puntos más importantes y a participar en
todas partes, en todas las operaciones de importancia, como, por ejemplo:
Cercar
y aislar a Petrogrado, apoderarse de la ciudad mediante un ataque combinado de
la escuadra, los obreros y las tropas; he aquí una misión que requiere arte y
triple audacia.
Formar
con los mejores obreros destacamentos armados de fusiles y bombas de mano para
atacar y cercar los "centros" del enemigo (escuelas militares,
centrales de Telégrafos y Teléfonos, etc). La consigna de estos destacamentos
debe ser: antes perecer todos que dejar pasar al enemigo.
Confiemos
en que, si se acuerda la insurrección, los dirigentes aplicarán con éxito los
grandes preceptos de Danton y Marx.
El
triunfo de la revolución rusa y de la revolución mundial depende de dos o tres
días de lucha."
Lenin. Consejos de un ausente. 8 de octubre de 1917.