La crisis de los
imperios coloniales
Al
concluir la Segunda Guerra Mundial, las potencias europeas aún tenían sus
inmensos imperios coloniales sin que se previera que esta situación fuese a
cambiar. Sin embargo, en pocos años, la mayor parte de las colonias logró su
liberación. Durante los diez años siguientes a la finalización del conflicto
mundial, la descolonización tuvo su epicentro en Asia y en el mundo árabe, en
este último caso entrelazada con el conflicto desatado por la creación del
estado de Israel (1948). Desde fines de los años cincuenta hasta 1975 el
proceso descolonizador se concentró en África Subsahariana. La última etapa se inició con el
derrumbe del imperio portugués en 1975.
La
descolonización fue, junto con la Revolución Rusa, el proceso más significativo
del siglo XX y revolucionó el escenario internacional. En 1945 la ONU estaba
integrada por 51 países, y en 1975, por 144. El debilitamiento de los estados
europeos y el anticolonialismo de Estados Unidos y la Unión Soviética
favorecieron la caída de los imperios coloniales. Los Estados Unidos se oponían
al orden colonialpor su historia y por su interés en el comercio libre. No obstante,
frente a la posibilidad de que la liberación nacional favoreciese a los
comunistas, como en el caso de Indochina, apoyaron los intereses
metropolitanos. La Unión Soviética, aunque creía que los movimientos
anticolonialistas debilitaban al capitalismo, no contribuyó decididamente a
fortalecerlos, y hasta los años setenta su política exterior evitó cualquier
clase de acción que cuestionara las áreas de influencia
surgidas de la Segunda
Guerra Mundial.
Aunque
con diferentes modalidades, ritmos e intensidades, en las sociedades coloniales
fueron creándose condiciones que erosionaron el vínculo de dependencia, a la
vez que emergían actores que exigieron su liquidación. Este proceso incluyó la
presencia de nuevas clases y sectores formados al calor de los cambios
económico y el desarrollo de la
educación que pasaron a conformar los movimientos de liberación.
Una
vez independientes los ex-territorios coloniales quedaron atrapados en el
círculo vicioso de unas economías muy dependientes de los avatares del mercado
mundial, unos estados frágiles y al mismo tiempo autoritarios, y la trágica
politización de las diferencias culturales y religiosas.
Independencia de la India
Al terminar la
Primera Guerra Mundial, la India había iniciado un firme proceso para liberarse
del dominio británico. Mohandas Karamchand Gandhi (1869-1948) dirigía este movimiento. Este personaje
defensor de una actitud moral opuesta a la violencia, procedía de la casta de
los comerciantes y desde su niñez fue influido por el ambiente piadoso que se
vivía en su casa. Estudió en Inglaterra la carrera de dere, en cho y al
terminar, en 1893, se trasladó a Sudáfrica en calidad de asesor jurídico de una
empresa india. Durante su estancia en ese país, Gandhi presenció el trato humillante que los nativos recibían de
la población blanca, experiencia que sería definitiva para su futura vida
política.
Gandhi vivió en Sudáfrica 20 años y cuando estuvo en
prisión en numerosas ocasiones debido a sus protestas en contra de la
discriminación racial. En 1896 comenzó a propagar la política de resistencia
pasiva y de no cooperación con las autoridades sudafricanas. En 1914 logró que
el gobierno sudafricano accediera a satisfacer algunas de sus demandas en favor de la población nativa.
De regreso a su país, Gandhi pronto se convirtió en el
máximo exponente de la lucha por el autogobierno de la Inida y por su
independencia económica y cultural respecto a Gran Bretaña, mediante la práctica
de la no violencia. A partir de 1919, a raíz de que el Parlamento británico autorizó a los líderes coloniales
poderes de emergencia para hacer frente a las actividades subversivas, Gandhi
inició un movimiento de resistencia pasiva que se extendió por toda la India.
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| Nehru y Gandhi |
La independencia económica de la India era el punto culminante del
movimiento, puesto que la explotación de los campesinos indios por los
industriales británicos había originado, además de una pobreza extrema, la
virtual destrucción de la industria India. Para resolver el problema de
sustituir los productos británicos y satisfacer la demanda, Gandhi propueso
volver a las industrias artesanales y, como ejemplo, comenzó a usar la rueca
buscando al mismo tiempo simbolizar la vulelta a la sencilla vida campesina que
predicaba, así como el renacimiento de las industrias autóctonas, como el
hilado manual. Sus medios de acción consistían en medidas de no
colaboración y de abstención, a través de huelgas de hambre, protestas
pacíficas, no participación en las elecciones e incumplimiento de leyes
injustas.
A la par de Gandhi surgió otro personaje del
movimiento independentista, Nehru, quien en poco tiempo alcanzó popularidad,
sobre todo en las generaciones jóvenes. Bajo la influencia de las ideas
socialistas, Nehru pensaba que la lucha en la India no solo debía ser un
movimiento de liberación nacional, sino también de liberación social. Ambos
líderes se unieron en 1930 para llevar adelante una gran campaña de
desobediencia civil que duraría hasta 1942 momento en que son apresados.
La
resistencia fue en aumento, recrudeciendo luego de la Segunda Guerra Mundial, donde la India ayudó a los ingleses, con la promesa de
obtener su independencia, si bien con la condición que se resolvieran las
diferencias que existían entre hindúes y musulmanes, los dos grupos étnicos
mayoritarios de la región. Gandhi apoyaba la idea de un único país en el que
pudiesen convivir ambos grupos.
Tras
un largo y difícil proceso, en agosto de 1947 la India dejó de estar bajo
soberanía británica para dar paso a las formación de dos Estados independientes:
India (de mayoría hindú), y Pakistán (de mayoría musulmana).
El 15 de agosto de 1947, se estableció
formalmente la Unión India, gobernada por Nehru, como primer ministro. En 1948,
Mahatma Gandhi, murió asesinado por un
radical hinduista. En 1949 por una nueva Constitución, la India se
convirtió en una República Federal, integrante de la Commonwealth.
A
continuación algunas frases de Gandhi para reflexionar…
·
"La violencia es
el miedo a los ideales de los demás."
·
"Nuestra
recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado. Un esfuerzo total
es una victoria completa."
·
"Si quieres
cambiar al mundo, cámbiate a ti mismo”.
·
"Ojo por ojo y el
mundo acabará ciego."
Material elaborado a partir de:
BÉJAR, M.D (2013) Historia del siglo XX. Europa, América,
Asia, África y Oceanía, Buenos Aires, Argentina, Ed. Siglo veintiuno
editores.
DELGADO DE CANTÚ, G (2010). Historia Universal. De la era de las
revoluciones al mundo globalizado, México, Ed.Pearson Educación.
